Se trata de una alternativa ecológica y cómoda en cuanto a la generación de calor dentro de nuestra vivienda se refiere, pues combina el uso de una caldera tal y como la conocemos con el aprovechamiento de la energía térmica que produce el sol, una mezcla que ha permitido a muchas personas ahorrar en costes y en consumo energético.

De forma general este tipo de calderas se componen de un depósito de almacenamiento y unos captadores de radiación, el depósito normalmente se encuentra dentro de la vivienda mientras que los captadores en el exterior, en espacios abiertos como tejados, donde puedan recibir la mayor cantidad de radiación posible, aunque también hay algunos modelos en los que el depósito se encuentra en el exterior junto a los captadores.

¿QUÉ SON LAS CALDERAS SOLARES?

Su funcionamiento es bastante sencillo los paneles solares se encargan de obtener el calor de los rayos solares, el cual es utilizado para precalentar el agua, la cual puede entrar directamente al circuito para ser utilizada o servir como apoyo para disminuir la demanda energética de otros equipos, aunque es importante mencionar que los captadores no tienen la capacidad de mantener una temperatura fija pues trabajan de acuerdo a la condiciones meteorológicas.

El modelo más utilizado es el de las calderas híbridas, funcionan combinado la energía térmica con algún otro tipo de combustible fósil o electricidad, de esta forma permiten tener un flujo continuo de calor incluso por las noches o en días nublados cuando el rendimiento de los captadores puede ser menor, pueden ser empleadas tanto para calentar el agua que utilizamos en nuestro dia a dia, como para suministrar aquellos sistemas de calefacción que funcionan conectados al circuito de agua caliente de la vivienda.

También existen otros tipos, aunque son menos frecuentes, por ejemplo están los sistemas totalmente solares, los cuales tienen la desventaja de perder eficacia durante periodos prolongados de poca intensidad de luz o también aquellos que aprovechan el excedente de energía generado por los sistemas fotovoltaicos gracias al uso de acumuladores de calor, con los cuales es posible ir liberandolo de forma paulatina de acuerdo a las necesidades de la vivienda, su desventaja es que pueden ser utilizados únicamente para calentar el ambiente y no en fluidos como el agua sanitaria.

La instalación de los sistemas de caldera solar sol recomendable en viviendas de nueva construcción o que estén considerando hacer reformas, pues hay que tener en cuenta que hacer este cambio implica ciertas obras para adaptar la instalación existente, además es importante valorar el acceso que la vivienda tiene a la luz del sol, para elegir la mejor ubicación que permita obtener el mayor rendimiento posible de la misma.

Su mantenimiento es bastante sencillo, pues si la instalación se realiza de forma adecuada bastará con hacer revisiones preventivas entre una o dos veces al año, dependiendo de la exposición que el sistema tenga a los elementos de la naturaleza y de la calidad del agua en la zona.

Parece ser que el aprovechamiento de la energía solar es el futuro de las energías renovables, pues se sigue trabajando en formas de optimizar este tipo de sistemas de captación, por ejemplo se han desarrollado colectores especiales, que son capaces de obtener un mejor rendimiento incluso en épocas invernales.

¿QUÉ SON LAS CALDERAS SOLARES?